Una mirada sobre nuestra forma de aprender.
En estos últimos años el mundo de la información ha evolucionado vertiginosamente. ¡Qué lejos quedaron las enciclopedias en papel, con montones de volúmenes de anexos para mantener la información actualizada! En casa de mis padres todavía está la que yo usé en mi época de estudiante (me refiero a estudiante en la enseñanza reglada, porque estudiante sigo siendo hoy ;-). Era tan grande y tan cara que venía con su propia librería, que preside aún el salón.
Sin embargo ahora lo difícil no es conseguir información, con San Google, la información está a un clic. Lo realmente difícil es saber qué es información veraz y fiable, de qué páginas fiarte y de cuáles no.
Por eso como estudiantes, tanto nuestros hijos como nosotros nos enfrentamos a un mundo diferente. Recibimos información 24 horas al día por la red, los blogs, los emails, la televisión, el móvil, la tablet… Ahora el problema es discriminar qué nos interesa y qué no. Y para eso, además de memorizar información, es necesario desarrollar otras herramientas que nos permitan movernos con comodidad en este mundo en contaste cambio.
El vídeo que comparto con vosotros hoy habla de la evolución (o mejor de la no evolución) del sistema educativo actual, un sistema creado en la ilustración y que todavía arrastramos. Sobre él se me ocurren varias reflexiones.
- Nos muestra que con el sistema actual, con 5 años el 98% de los niños den resultados de genialidad en los test y solo 7 años después esos mismos test den un porcentaje inferior a la tercera parte. ¿? ¿No sería más inteligente, apoyarlos en el uso de nuestro pensamiento lateral, de nuestra creatividad?. La información ya está. Pero aprender que lo blanco es blanco y lo negro es negro, no es muy útil como adulto en el mundo de hoy. Aprender a encontrar las distintas soluciones de un mismo problema, ampliar tu mapa para que quepan los de otros, fomentar que las personas salgan de su zona de comodidad para poder llegar al aprendizaje real son herramientas mucho más poderosas para nuestra vida.
- Una educación que va casi exclusivamente dedicada a la parte intelectual del ser humano, pero nosotros no solo somos intelecto. Y lo que es más importante (para la educación) no solo aprendemos con el intelecto, las emociones tienen un papel vital en el aprendizaje. Y para implicar las emociones en la formación esta tiene que ser práctica. Tenemos que vivir las cosas para aprenderlas. No vale con leer, escuchar o copiar para aprender, además hay que hacerlo vida, aprender de cómo lo hacemos, cómo podemos mejorarlo. “A hacer se aprende haciendo.”
- Cuando mis hijas empezaron a ir al colegio, yo las animaba para que pusieran más esfuerzo en aquello en lo que obtenían peores notas. Había aprendido que todas tenían que ser buenas. Pero ahora se me ocurre un pregunta, ¿Por qué dedicar nuestro esfuerzo a ser “mediocres” en aquello que no es nuestro don? ¿No será más interesante dedicar solo el esfuerzo justo a eso y poner todo nuestro empeño en lo que hacemos bien y encima disfrutamos haciendo? ¿No consideramos afortunados a los que hacen lo que les apasiona y consiguen vivir de ello?
- Además, durante los dos o tres primeros años de nuestra vida, nos permiten equivocarnos para aprender a comer, a andar a usar el water, a pintar, jugar con plastilina, recortar… Durante ese tiempo maravilloso nos dice: “No importa si te ha salido mal, practica, repítelo hasta que te salga“. Pero al llegar a la edad del cole… se acabó el sueño. Se prohíbe el error, sin importar el grado de madurez de la persona.
- “Tienes 5 años, tienes que leer correctamente.”
- “Ya pero es que mi hijo nació en diciembre.”
- “Lo siento, pero está en primero de primaria… los objetivos curriculares hay que cumplirlos.”
Por todo esto, sigo pensando que debemos ofrecer formaciones vivenciales, diferentes, que faciliten a los demás encontrar lo que aman, lo que les apasiona, lo que les hace sentir vivos, disfrutar cada día como si fuera el último, a pensar distinto y encontrar soluciones nuevas a problemas nuevos o viejos, a ver oportunidades en lugar de dificultades, a sentirse “cómodos” fuera de la zona confort…
Todo esto se me ocurrió al hilo del vídeo:
Paradigma del Sistema Educativo
He dejado dos link del vídeo: está traducido y en versión original subtitulada, ¡para gustos, los colores! 😉
Puedes verlo traducido…
…o en versión original, con subtítulos
“Hay 3 tipos de personas en el mundo: los inamovibles, los movibles y los que se mueven.”
Estas son palabras de Benjamin Franklin, recitadas por Ken Robinson (el autor del vídeo: Paradigma del Sistema Educativo) en enero del presente año, al finalizar su exposición dada en uno de los eventos organizados por RSA, donde desarrolla algunas de las ideas que luego profundizaría en su charla de mayo en TED “Bring on the Learning Revolution”. Learning Cognitive “tradujo” en un formato de animación Scribing, las principales ideas de la charla en RSA.
Espero que te haya gustado este artículo, te haya resultado inspirador y motivador para tu labor del día a día, y que uses los nuevos aprendizajes desde ya mismo. ¡Verás qué buenos resultados da!
Paradigma del Sistema Educativo
Y si te ha gustado, te agradeceré que lo compartas y que pulses sobre el botón “Me Gusta”, así me das feedback y te iré conociendo mejor en tus gustos, y yo seguiré aprendiendo… Y desde luego, estaré encantado de recibir tus comentarios, bien a través de los comentarios de este artículo, o bien a través de la página de Facebook de Formación Para Formadores.
Hasta la próxima. Un gran abrazo,
Miguel Ángel Romero
Fundador y Director de FormacionParaFormadores.com
Otra Formación Es Posible.
¡Y Tú Puedes Ser Protagonista!
2 Comments
Georgina Ramirez Espindola
Creo que nos condicionaron tanto con aquello del negro y el blanco que ahora nos cuesta trabajo elegir y trabajar sobre nuestra propia escala de grises. Ciertamente tenemos mucho trabajo por hacer, por fortuna, una vez que reconoces el problema empiezas a encontrar los caminos correctos.
Josep Maria Roig Guitart
Reinvertiré la educación.
Gracias.
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